EDITORIAL: Los peligros de la Ley de amnistía
En este blog nos hemos posicionado reiteradamente en contra de esta Ley de amnistía que empieza ahora su andadura final, tras el acuerdo al que han llegado el PSOE, Junts y ERC para introducir una serie de enmiendas al texto con la finalidad explícita de «blindar» a Carles Puigdemont frente a posibles actuaciones judiciales. Y decimos en contra de esta ley concreta porque si bien es cierto que muchos autores han defendido que ninguna ley de amnistía en abstracto cabe en la CE (por diversos motivos que ahora no vamos a repetir) no lo es menos que otros, entre ellos algunos juristas de Hay Derecho han considerado que una amnistía en abstracto podría ser constitucional si se dieran una serie de requisitos que, lamentablemente, no se producen en el caso específico de la Ley de amnistía que previsiblemente se aprobará en unas semanas. En este sentido, remitimos al debate online que hace unos meses hicimos en Hay Derecho y que se puede encontrar en nuestro canal de YouTube.
En todo caso, desde entonces han pasado muchas cosas que ahondan nuestra firme convicción de que estamos frente a una amnistía no ya inconstitucional sino contraria a los estándares mínimos exigibles en la Unión Europea. En ese sentido, el tan traído y llevado borrador de dictamen de la Comisión de Venecia es muy claro cuando advierte de los riesgos de una amnistía profundamente divisiva, no debatida públicamente a través de los cauces institucionales oportunos, que se adapta como un guante a las necesidades procesales concretas de una persona con nombre y apellidos y que se ha tramitado con urgencia y sin unas mínimas garantías técnico-jurídicas.
Cierto es que también hace otras consideraciones que permitirían avalar una amnistía de otras características: de entrada, una que buscase sinceramente una reconciliación o la superación de una crisis política e institucional excepcional. Pero sabemos sencillamente que esto no es verdad porque así lo dicen un día sí y otro también los dirigentes independentistas, con Puigdemont a la cabeza. Esto no va de estabilidad parlamentaria, pactos de legislatura o reconciliación: va de conseguir la impunidad para unos cuantos políticos por unos actos muy graves a cambio de prestar sus votos para un gobierno que no podría existir sin ellos. Es decir, estamos muy cerca del concepto de autoamnistía, otro concepto que se considera rechazable desde el punto de vista de los valores de la Unión Europea por razones obvias: si los políticos pueden declarar su impunidad cuando les convenga ¿Dónde queda el imperio de la ley y el Estado social y democrático de derecho?
Sentado lo anterior, y constatado que la amnistía va a seguir adelante por la enorme inversión —en términos de coste político— para conseguir este acuerdo realizada por el Gobierno en general y por su Presidente en particular (que delegó en su Ministro de Justicia la defensa del acuerdo por lo que cabe preguntarse razonablemente si quería evitarse el descrédito de haber cambiado, una vez más, de opinión) debemos de preguntarnos por las consecuencias.
Pues bien, desde el punto de vista técnico, las enmiendas últimas no modifican sustancialmente lo ya acordado con anterioridad ni impiden, a nuestro juicio, que se planteen con posibilidades de éxito posibles cuestiones de inconstitucionalidad o prejudiciales con respecto a una serie de normas de la ley, desde los delitos incluidos (o excluidos) pasando por el ámbito temporal (que se ha ampliado, por cierto), por el hecho de que se haya cortado un traje a medida para el sr. Puigdemont o trate de una amnistía «a la carta» o por lo dispuesto en el art. 4 respecto del levantamiento de medidas cautelares. Por no hablar de la no mención al Código Penal español y sí a la directiva que éste traspone en materia de terrorismo, como si se pudiera obviar la aplicación de la normativa penal española cuando precisamente se pretenden amnistiar delitos previstos en dicha normativa.
Sentado que los abogados de Junts son conscientes de los problemas técnicos que tiene la norma y que han señalado numerosos juristas, lo que cabe preguntarse es para qué sirve todo esto. Pues a nuestro juicio, como empieza a verse, para asegurar oficialmente —esto ya lo ha hecho el ministro Bolaños— que la amnistía es perfectamente constitucional, cubre a todos los afectados y sobre todo a Puigdemont, es conforme al borrador de dictamen de la Comisión de Venecia —lo que sencillamente no es cierto— y si algo sale mal, la culpa es de los jueces fachas o de la «derecha judicial». Con este discurso, se blanquea que los líderes de Junts siempre más audaces, hayan salido a pregonar que los jueces que no apliquen sin rechistar este engendro técnico-jurídico serán culpables nada más y nada menos que de prevaricación. Suponemos que ya se ocuparán ellos de poner las querellas correspondientes o, mejor aún, de atemorizar e intimidar a los jueces que se atrevan a desobedecerles. No olvidemos que muchos de ellos están en órganos unipersonales en Cataluña, no en el TS ni en la AN, objetivos permanentes —precisamente por eso— de los independentistas catalanes.
Por tanto, no podemos ser muy optimistas con respecto a lo que nos depara el futuro inmediato. Esta ley es un poderoso corrosivo de nuestras instituciones y nuestro Estado social y democrático de Derecho, en la medida en que importa el virus populista iliberal que ya opera en Cataluña desde hace más de una década. No sirve para la reconciliación ni para superar ninguna crisis: por el contrario, abre otra de enormes proporciones. Sus defensores necesitan, además, intimidar a jueces y magistrados y socavar la separación de poderes. Veremos cosas muy preocupantes en los próximos meses, y es importante que los ciudadanos españoles sean conscientes del desafío una vez que su Gobierno ha optado por desentenderse de la defensa de los principios y valores constitucionales por mucho que proclame lo contrario. Pero no por eso hay que desanimarse: cabe emplear las herramientas jurídicas que el propio Estado de Derecho contempla, sin extralimitaciones pero también sin temor.Debemos trasladar a jueces y magistrados que la ciudadanía española confía en ellos. Debemos hacer pedagogía y combatir la desinformación y la mentira, aunque provenga de fuentes oficiales. Debemos confiar también en la Unión Europea. Y, sobre todo, debemos confiar en nosotros mismos: un Estado social y democrático de Derecho resistirá cualquier tipo de virus populista e iliberal si sus ciudadanos así lo deciden.
Editores del blog “¿Hay derecho?”
Un gran editorial .
Muy pocos medios se han planteado los efectos de la continuación de un gobierno de Sánchez con los socios y apoyos de la investidura. Lo que demuestran la falta de independencia , solvencia profesional y su compromiso en la defensa del interés general y del sistema democrático del resto¿ Cómo se pueden considerar periodistas los que no vieron u ocultaron lo que estaba a la vista de cualquiera que tuviera un mínimo de experiencia?.
Sánchez, si continúa dependiendo de los mismos socios, no podrá cumplir los compromisos de una unión política en la que sus miembros han de tener un nivel mínimo de calidad democrática.
La independencia judicial es clave y no la quieren implantar a pesar de las advertencias y amenazas de la UE.
La continuidad del mismo gobierno compromete no sólo la financiación de los fondos que están condicionados al cumplimiento “verificado” de reformas estructurales contradictorias con los programas de sus socios, sino, también, la continuidad en esta . ¿ Con cuantos votos cuentan para la reducción del gasto público , del déficit y del endeudamiento o las reformas estructurales que nos exige la UE?
¿ Qué pasará cuando sus votantes comiencen a sufrir en su nivel vida los efectos de una gestión pública tan incompetente e irresponsable?. Los que gestionan las Comunidades Autónomas que han apoyado a Sánchez , Canarias; Asturias y Castilla La Mancha, están entre las más beneficiadas del actual modelo de financiación ¿ De verdad se creen que si cambian de modelo no les perjudicará? ¿ Y a los de la España vacía?¿ Qué futuro les espera a sus políticos?.
¿Apoyarán los nacionalistas leyes contrarias a su programa y a sus apoyos ?. En las elecciones próximas en el País Vasco , Sánchez que ha blanqueado y dado protagonismo a Bildu ¿ por quién se decantará? ¿De quién está más cerca ideológicamente?¿ Qué pensarán los votantes del PNV y los sectores económicos y profesionales cuando tengan un régimen como el que ha arruinado Cataluña, de sus dirigentes que lo han permitido?.
Si Sánchez no puede continuar porque no adivinó lo que le sucedería ¿ Qué pasará con el PSOE y los proyectos que ha tenido que aceptar para asegurar su continuidad , como el de la amnistía? ¿ Y también, con los medios de información ,los intelectuales , profesionales …funcionarios públicos que le han apoyado tan ciegamente ?.¿Cómo no previnieron que se jugaban su futuro personal y profesional y que Sánchez, como no es de fiar , los podía dejar colgados en cualquier momento?.
Es interesante como el tono de esta editorial me ha recordado este otro: https://blogs.publico.es/juan-carlos-monedero/2024/03/10/pasalo-memoria-de-otra-mentira/?doing_wp_cron=1710139881.2420129776000976562500#md=modulo-portada-fila-de-modulos:4×15-t2;mm=mobile-medium (que hace referencia a lo que pasó poco después del 11-M de 2004, que hoy cumple su 20 aniversario).
Principalmente es por la parte final: “Y, sobre todo, debemos confiar en nosotros mismos: un Estado social y democrático de Derecho resistirá cualquier tipo de virus populista e iliberal si sus ciudadanos así lo deciden”.
En el otro artículo acaba hablando de que “sólo el pueblo salva al pueblo”.
La idea, con la que estoy de acuerdo, es que sólo la movilización personal (de “gran cantidad” de gente) puede hacer que cambien las cosas, ya que los partidos y sus líderes pocas veces pretenden cambios significativos.
Y por eso estoy aquí, comentando, para intentar vivir en un una Democracia donde se cumplan las leyes. Y por eso he de decir que la amnistía me parece un buen paso (la piden los políticos y la mayoría de la sociedad catalana) para que vivamos en algo más parecido a una Democracia, esto es: Sin persecución ideológica.
El siguiente paso, obviamente, sería intentar vivir en un Estado de Derecho. Para ello es necesario que los jueces, que “presuntamente” han prevaricado al hacer la persecución ideológica (o sea: los auténticos “presuntos” terroristas), sean juzgado por sus actos contra la ley.
Como se ve mi punto de vista sobre la amnistía y de si España es un Estado Democrático y de Derecho es completamente opuesto al de la editorial. En el 20 aniversario del 11-M está claro que aún hay que luchar para que la verdad aflore. ¡Espero que la mayoría de españoles luche por ello!
NOTA: Creo que no hay nada mejor que los hechos para respaldar la verdad. Estoy convencido que cualquier observador imparcial puede darse cuenta que los jueces españoles no han aplicado la ley (por ejemplo: artículo 71.2 de la CE) cuando han tratado con “discrepantes”, y como resultado les salen sinsentidos como sediciones realizadas por menos de una docena de personas.
No estoy seguro de que entienda el concepto de Estado de Derecho. Consiste en que se aprueba una Constitución que se ha de respetar por todos, y que todos (incluso los políticos, especialmente los políticos) están sometidos a las leyes, que aprueba el Parlamento y que aplican los jueces. Si uno solo acepta la aplicación de las leyes que a uno le gusta (por mucho que diga que esa es “lo que opinaría cualquier observador imparcial”), no acepta el Estado de Derecho. Si además acusa a los jueces (ordinarios y del Tribunal Constitucional) de prevaricar y terrorismo, aunque sea presuntamente, está claro que el sistema que usted quiere es aquel en el que el poder no tenga ningún límite. Mal asunto, porque el poder no lo van a tener siempre los que más nos gustan.
No entiendo de dónde saca la idea de que yo deseo que el poder no tenga ningún límite. Es precisamente al revés: Quiero que haya límites, que sean muy claros… ¡Y que se cumplan!
Pero en España eso no sucede, como puede atestiguar cualquier observador imparcial en los dos hechos que indiqué. La réplica debería ser muy fácil. Basta con que se me indique el delito flagrante que cometió Oriol Junqueras (por ejemplo) desde que recogió el Acta de Diputado en Madrid hasta que fue llevado, horas después, a la cárcel. Porque el artículo 71.2 de la Constitución dice que no podía ser detenido en cualquier otro caso.
Así que tenemos a jueces que no aplican la ley (o sólo aplican aquella parte de la ley que les gusta). Y de esto se deduce que algunos jueces españoles no respetan la separación de poderes, ni el Parlamento, ni la Democracia ni la Constitución. Básicamente son “presuntos” prevaricadores y “presuntos” terroristas.
Disculpe. Pero Junqueras no fue detenido DESPUÉS de recoger su acta de diputado. Fue llevado de la cárcel al Congreso y luego devuelto a la cárcel a seguir cumpliendo su prisión preventiva. Por tanto dichos hechos no se ajustan a lo previsto en ese artículo de la constitución.
Disculpe, pero lo que significa lo que dice la Constitución es que no cabe la prisión preventiva para un Diputado/Senador. Y si hay duda, en un Estado de Derecho democrático, se aplicaría la interpretación más beneficiosa para el acusado.
Le recomiendo leerse con mucha atención este artículo que, más o menos, toca el tema (es largo, pero considero que muy instructivo): https://ctxt.es/es/20180124/Firmas/17494/catalu%C3%B1a-sentencia-investidura-tribunal-constitucional.htm
Si después de leerlo aún considera que se cumplió la Constitución: Pues ya me contará qué no le convence de la exposición que ahí se hace, aunque me temo que seguramente no le contestaré, porque considero que no hay más ciego que quien no quiere ver.
Usted está divagando. Ya le he dicho que Junqueras fue detenido ANTES de ser investido como diputado. Y la prisión preventiva fue debidamente justificada. Estaba acusado de los delitos asociados al intento de golpe de estado que había promovido. No tenía ningún sentido dejarlo en libertad ante el riesgo de que el acusado siguiese promoviendo a la población para participar en más altercados sediciosos.
Usted sigue sin querer entender (o reconocer) que los beneficiarios de esa futura amnistía participaron en un intento de golpe de estado. Nada que ver con “persecuciones ideológicas”. Se pasaron el marco constitucional por el arco del triunfo para intentar conseguir la secesión de Cataluña. Por tanto no merecen en modo alguno esa amnistía.
Veo que sigue gustando de inventarse delitos contra independentistas. ¿Acaso quiere hacer méritos para ascender en la carrera como magistrado o fiscal en España?
Porque si no: No le entiendo. Tal como ha indicado Segismundo Alvarez Royo-Villanova: “Mal asunto, porque el poder no lo van a tener siempre los que más nos gustan.”
Ya se lo he dicho otras veces: En realidad la no renovación del CGPJ está causando más daño al Estado (en HAY DERECHO hay un artículo reciente sobre ello) que todo lo que hemos hecho los independentistas (que básicamente han sido actos políticos que no van a ningún sitio y otro tipo de manifestaciones, tal como reconocieron los jueces alemanes).
Que sin embargo usted (y muchos otros) siga centrado en ir contra los independentistas ¿Seguro que no cabría definirlo como “persecución ideológica”?
No me invento ningún delito porque “golpe de estado” no es una figura penal. Es un concepto político. Y según la acepción 2ª de ese término según el diccionario jurídico de la RAE, los hechos del 2017 se ajustan a dicha definición. Por tanto no cabe hablar de “persecución ideológica”. Se les ha perseguido por sus actos; por su intento de golpe según el código penal vigente entonces. Después de casi 7 años entiendo que para usted debe de ser doloroso admitir que los líderes independentistas catalanes hayan podido caer tan bajo.
Su alusión a la renovación del CGPJ no le sirve a usted para negar el daño causado por la intentona golpista del independentismo catalán. Lo interpretaré como una cortina de humo para intentar desviar la atención sobre el tema en cuestión.
Pues si no estamos hablando de una figura penal entonces no cabe castigo por ello. Eso en un Estado de Derecho.
Y por eso, si han sido castigados por algo que en realidad no es delito: Pues para mí que se parece demasiado a “persecución política”, máxime cuando en las grabaciones de “ya te lo afina la fiscalía” se da a entender que hay que centrar el ataque en los independentistas, no en PSC ni otros.
Y sí, reconozco que hay gente a la que le pudo causar daño “el procés”, pero es un daño causado “en el alma”, como el que pueda sentir yo porque los líderes independentistas en realidad no tenían preparada una independencia. Y ese daño, si no está en el Código Penal… En fin, ya se lo he dicho.
Lo del CGPJ causa un daño real en las instituciones, el procés no causó daños reales (en realidad el único daño a las instituciones fue el del 155). Los líderes independentistas cayeron bajo, pero quienes hacen persecución ideológica deberían estar mucho más abajo. Mientras no se reconozca eso: No quiere repetirme tanto.
No, no estoy hablando de una figura penal, sino de un concepto político altamente reprochable, un intento de golpe de estado. Que tendrá que ser castigado según los hechos y el código penal existente. Por tanto no cabe hablar de persecución ideológica. Se ha perseguido a los líderes nacionalistas catalanes por haber intentado un golpe de estado asignándoles en juicio la figura penal correspondiente: sedición, malversación y desobediencia. Y el delito y pena correspondiente no dependen solo del daño causado sino también del dolo. Aparte de que sí habría causado mucho daño si hubiera habido respuesta por parte de una potencia exterior influyente.
En su respuesta afirma: “que todo lo que hemos hecho los independentistas”. Ese “hemos hecho los independentistas”, ¿Es usted independentista cumpliendo los requisitos de la CE? o ¿Es usted independentista desde fuera de la CE? porque luego también afirma “(que básicamente han sido actos políticos que no van a ningún sitio y otro tipo de manifestaciones, tal como reconocieron los jueces alemanes)”. Los jueces alemanes dieron una larga cambiada y a otra cosa. El independentismo no tenía votos para modificar el Estatuto y proclamó la independencia. Le recuerdo el Art. 22.2 de la CE. No fueron actos meramente políticos, se le quiso robar al resto de los españoles su propiedad de Cataluña. España es un proindiviso y los catalanes independentistas no son los propietarios de Cataluña. Tan propietario de Cataluña es un señor de Albacete como un señor independentista de Tarragona. Quizás éste sea el quid de la cuestión, que los catalanes independentistas se autoproclaman los únicos propietarios de Cataluña. Como decía Albert Boadella: “Yo soy diferente a usted porque tengo mi hecho diferencial. Usted puede tener el suyo (refiriendose al resto de españoles), pero ha de reconocer usted que el mío es superior al suyo, porque no voy a tener un hecho diferencial para ser inferior a usted”. ¡Despierte!, no se odia a Cataluña, es tierra española. Eso es una cantinela de los independentistas. Jordi Pujol dijo: “A quien tendremos que matar para que nos quieran”. Lamentable.
No todos los que se llaman progresistas y de izquierdas son demócratas.
Maduro y Ortega son progresistas y de izquierdas
Democracy Index ” reparte los países en : Democracia plena, Democracia imperfecta , Régimen híbrido y Régimen autoritario.
Están situados en el grupo de Régimen autoritario , entre otros , Venezuela y Cuba .
Podemos, Izquierda Unida , E.R.C. y EH BILDU ( y más como la CUP….) han demostrado su admiración por su régimen político .Solo tienes que fijarte que en los índices de calidad democrática están los últimos por sus notas en los campos investigados.
Hay en nuestro país dos tipos de políticos , intelectuales y periodistas, los partidarios de un régimen democrático ( con su izquierda y derecha) , que respetan las normas y las resoluciones judiciales , los derechos y libertades de todos los ciudadanos y los principios democráticos y los partidarios de regímenes autoritarios como los que dirigen Cataluña y una gran parte del gobierno de Sánchez, que no lo hacen . La democracia no es su sistema ni lógicamente el de la Unión Europea , que se basa en el. Nunca respetarán nada de lo anterior ,” les sobra” toda su legislación , la separación de poderes, el Parlamento , el control de la gestión política, el periodismo independiente y solvente, los que no opinan como ellos y hasta la oposición. Su sistema político en el que sueñan es otro. En el que la incompetencia, la corrupción, el despilfarro y el abuso de poder “de los nuestros” no tiene sanción .
Se dice en el artículo:
1. “muchos autores han defendido que ninguna ley de amnistía en abstracto cabe en la CE”
Coincido con ellos: La Amnistía excepciona el delito. Excepcionar el delito en el Estado Democrático de Derecho que proclama la CE es excepcionar el propio Estado Democrático de Derecho, lo que está en contra del Art. 1.1 de la CE, y por tanto, el concepto de Amnistía es inconstitucional. El legislativo no puede excepcionar el Estado Democrático de Derecho. Salvar la contradicción Amnistía-Estado Democrático de Derecho requiere una modificación de la CE, y así, sea refrendada por el pueblo español.
2. “una que buscase sinceramente una reconciliación o la superación de una crisis política e institucional excepcional”.
No se puede buscar una reconciliación saltandose la CE y la ley. Primero las modificaciones de la CE y la ley, y luego la reconciliación.
3. “estamos muy cerca del concepto de autoamnistía”
No. Estamos en un COHECHO.
4. “que se planteen con posibilidades de éxito posibles cuestiones de inconstitucionalidad”
Dependerá de si se da con miembros de la banda o si todavía quedan jueces en Berlín.
5. “No sirve para la reconciliación ni para superar ninguna crisis: por el contrario, abre otra de enormes proporciones”.
Lo subscribo.
Mientras, se finalice o no el asunto, Pedro Sánchez sigue de Presidente que es su objetivo.
Los que están aceptando la responsabilidad de ayudar a Sánchez colaborando en la destrucción del estado democrático , no saben lo que les espera.
El tema de la amnistía y los pasos hacia el “proceso autoritario sanchista “, afectará no solo a los políticos que los aprueben , sino también a los intelectuales y medios concertados que lo han apoyado y a la parte de la sociedad que lo ha permitido. Todos pasarán a la historia, PRISA , Hay Derecho, Jordi Gracía, X. Vidal Folch, La Vanguardia, Guerra ,González, ,García Ortiz, Conde-Pumpido, Savater, jueces , fiscales y funcionarios públicos, aunque con diferente calificación .
Los independentistas han elaborado el texto y Sánchez ha puesto ” sin escrúpulos” su firma.
José Ignacio Torreblanca en su artículo en El Mundo del 18 de septiembre de 2023 “ No busquen precedentes de amnistías” recoge los datos de las amnistías que se han firmado en el mundo desde 1990, En Europa, 34. “ en todos los casos , no solo se trató de conflictos armados en situaciones de transición política o descolonización sino que en todos ellos la amnistía se concedió al darse por cerrados y superados los hechos punibles. Aquí sin embargo, ni los proponentes ni los demandantes de la amnistía consideran tal exigencia requisito previo o posterior”.
Pasaría a la base de datos de la Universidad de Edimburgo y la Queen University de Belfast por ser la primera que se hace para conseguir unos votos que le hacen falta a Sánchez para ser Presidente en una legislatura en la que tiene muy difícil gobernar y en la que los beneficiarios han asegurado que “lo volverán a hacer” y lo harán desde el primer día.
En El País el 13/11/23 y tal vez por eso , Cebrián publicó uno de los artículos más importantes para la historia de periodismo democrático “ Disculpa a la traición ; premio a la culpa”: “Pedro Sánchez no debe preocuparse más por su lugar en la Historia: con toda probabilidad acabará metido entre la chatarra “.
Y con él estarán ,” con toda probabilidad “no solo los políticos que la aprueben , también los intelectuales , profesionales , medios concertados, jueces, fiscales ,funcionarios públicos … que lo han apoyado tan ciegamente .