La ética y la estética: El extraño caso de la indemnización en diferido
Me disculparán si comienzo pidiéndoles que recuerden la nota del Partido Popular que anunciaba la renuncia definitiva de Luis Bárcenas al cargo de tesorero y el fin de su militancia. Tan sólo ocho días después de su emisión, el 16 de abril de 2010, la formación le dio de alta en la Seguridad Social como trabajador por cuenta ajena contratado por tiempo indefinido. Y comunicó su baja (calificándola de voluntaria) el pasado 31 de enero, el mismo día en que El País publicaba los ahora célebres cuadernos contables manuscritos que se le atribuyen. Así figura en el informe de vida laboral del Sr. Bárcenas, documento cuya difusión mediática resulta un tanto inexplicable, ya que contiene datos personales que gozan de protección legal y tienen, por tanto, carácter reservado. ¿Qué sucedió entre ambas fechas? En realidad, esta pregunta es sólo un macguffin, un elemento de suspense que motiva a los personajes y al desarrollo de la trama, pero que carece por sí misma de relevancia. Alfred Hitchcock, autor de la expresión, decía que en las historias de espías, siempre son los documentos. Muy apropiado. El auténtico interés para el ciudadano español –no sólo el indignado votante o simpatizante del PP- […]
Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y miembro del Cuerpo Superior de Técnicos de la Administración de la Seguridad Social. Ha sido ponente en numerosos cursos y es coautor de la obra “Ley General de Seguridad Social comentada y con jurisprudencia”, editada por La Ley en 2009. En la actualidad ocupa el cargo de Subdirector Provincial de la Tesorería General de la Seguridad Social de Asturias, hallándose especializado en la recaudación ejecutiva de los recursos con que se financia el Sistema.